La Escasez de Harina en Cuba: Un Desafío para la Canasta Básica
La escasez de harina en Cuba representa un serio desafío para la producción de pan, un alimento esencial en la canasta básica de los cubanos. La situación actual en la isla es crítica, con el Gobierno disponiendo únicamente de 250 toneladas diarias de harina, muy por debajo de las 700 toneladas necesarias para satisfacer la demanda. Esta carencia ha puesto en jaque la estabilidad en el suministro de pan normado, un elemento básico en la dieta de la población.
Problemas Logísticos y Soluciones Temporales
Los funcionarios del Ministerio de la Industria Alimentaria (MINAL) han señalado los embarques de harina de trigo planificados como una de las causas principales de esta escasez. Para mitigar el impacto de este déficit, se ha recurrido al uso de "productos extensores", que permitirían compensar aproximadamente el 15% de la falta de harina. A pesar de estas medidas, la directora comercial de la Empresa Cubana de Molinería, Zaily Pérez Hernández, ha advertido sobre las severas afectaciones en la producción de pan, subrayando la inestabilidad en el suministro de harina de trigo.
Esfuerzos por Aumentar la Producción
En el corazón de esta crisis se encuentra un solo molino en Cienfuegos, actualmente activo y produciendo apenas 250 toneladas diarias de harina. Emerio González Lorenzo, presidente del Grupo Empresarial del MINAL, ha revelado planes para contratar toda la harina importada disponible a través de entidades no estatales, en un intento por aumentar la producción. Sin embargo, incluso con estos esfuerzos, se reconoce que no se logrará satisfacer completamente la demanda. Las autoridades estiman necesitar unas 20,000 toneladas mensuales de harina, solo para el pan normado.
Causas y Perspectivas a Futuro
La escasez de harina se atribuye a restricciones financieras y logísticas, exacerbadas por la situación económica del país. A pesar de las dificultades, hay esperanzas de que la situación mejore en marzo con la llegada de dos barcos, uno cargado con harina y otro con trigo. La producción futura de pan dependerá en gran medida de la cooperación entre el sector estatal y los actores económicos privados, así como de la disponibilidad de harina.
Reflexión sobre la Crisis
La crisis de harina en Cuba no es un fenómeno nuevo, sino una situación crónica que ha afectado al país durante años. En enero de 2024, el MINAL celebró el logro de asegurar el pan normado para ese mes, lo que refleja la gravedad y persistencia del problema. Esta escasez no solo afecta la producción de pan sino que también pone de manifiesto los desafíos económicos y logísticos que enfrenta Cuba en su esfuerzo por garantizar alimentos básicos para su población.
La situación de la harina en Cuba es un claro ejemplo de cómo problemas logísticos y restricciones económicas pueden afectar directamente la seguridad alimentaria de una nación. Aunque se están tomando medidas para mitigar el impacto de esta escasez, la solución a largo plazo requiere de una estrategia más integral que aborde las raíces del problema económico y logístico del país. Mientras tanto, la población cubana espera mejoras tangibles que aseguren el acceso continuo a alimentos básicos como el pan.
