En el contexto actual de cambios climáticos significativos, América del Sur ha experimentado recientemente una serie de eventos meteorológicos extremos. Bárbara Tapia Cortés, coordinadora técnica de Servicios en la Oficina Regional de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) para las Américas, brindó una perspectiva detallada sobre cómo el fenómeno de El Niño y el calentamiento global están influenciando estas condiciones en la región.

Durante la última semana de enero de 2024, se registraron temperaturas récord en diversas ciudades de Sudamérica. En Chile y Argentina, así como en la zona central de Colombia, se vivió una ola de calor intensa. Por ejemplo, Santiago de Chile alcanzó 36,7°C, la tercera temperatura más alta en 112 años. En Colombia, donde se declaró una situación de desastre natural debido a incendios forestales, se registraron temperaturas por encima del promedio, destacando 40,4ºC en Jerusalén (Cundinamarca) y cifras similares en otras localidades.

El actual episodio de El Niño, que ha estado presente desde mayo de 2023, ha jugado un papel crucial en el incremento de estas temperaturas extremas. Este fenómeno natural, exacerbado por el calentamiento global, ha conducido a un aumento en la frecuencia e intensidad de eventos climáticos extremos. Según la experta de la OMM, los últimos episodios de El Niño se han desarrollado en un contexto de temperaturas oceánicas ya elevadas, lo que intensifica su impacto.

El cambio climático está influenciando de manera significativa estos fenómenos. La OMM enfatiza que, con cada año registrando temperaturas más altas que el anterior, los eventos extremos como olas de calor y sequías se vuelven más frecuentes y severos. Esto implica mayores riesgos y daños para las poblaciones afectadas.

Los incendios forestales, exacerbados por las altas temperaturas y condiciones climáticas secas, han sido un problema considerable en la región. A finales de enero de 2024, Chile reportó 81 incendios activos. Del mismo modo, en Colombia, se mantienen alertas en cerca de 900 municipios. Además, la Patagonia Argentina ha experimentado una ola de calor extrema con temperaturas que han superado los 40ºC en varias localidades.

Estas condiciones climáticas no afectan a todos por igual. Grupos vulnerables como adultos mayores, niños, personas con enfermedades crónicas y quienes trabajan al aire libre están particularmente en riesgo. Se estima que entre 2000 y 2019, aproximadamente 489.000 personas fallecieron anualmente a causa del calor.

Se espera que los eventos extremos como olas de calor se mantengan durante gran parte del verano y los primeros meses del otoño de 2024. Aunque aún es temprano para predecir si el 2024 superará al 2023 como el año más cálido registrado, las condiciones actuales indican una tendencia creciente en las temperaturas extremas.

La información proporcionada por Bárbara Tapia Cortés refleja una realidad preocupante en cuanto al impacto del cambio climático y El Niño en Sudamérica. Estos fenómenos están provocando no solo temperaturas récord, sino también condiciones extremas que afectan tanto al medio ambiente como a la salud pública. La necesidad de una mayor conciencia y acción frente al cambio climático se vuelve cada vez más evidente ante estos eventos.