Nacido en Cádiz en 1732, Vicente Tofiño de San Miguel se destacó tempranamente por su sed de conocimiento y su habilidad para la astronomía y la navegación. Su contribución más destacada fue la creación del Atlas marítimo de España, que representó un avance significativo en la precisión y detalle de la cartografía náutica de la época. La incorporación de técnicas modernas de levantamiento geodésico y la utilización de instrumentos avanzados para la medición convirtieron este atlas en una herramienta indispensable para la navegación y el estudio geográfico del siglo XVIII.

Como director de las Academias de Guardiamarinas en Cádiz, El Ferrol y Cartagena, Tofiño no solo educó a futuras generaciones de marinos en las artes de la navegación y la cartografía, sino que también inculcó en ellos un profundo respeto por el conocimiento científico. Su labor en estas instituciones sentó las bases para el desarrollo de una élite científica dentro de la Armada Española, capacitando a los oficiales en disciplinas como la astronomía náutica y las matemáticas aplicadas a la navegación.

El Atlas marítimo de España fue una obra monumental que marcó un antes y un después en la historia de la cartografía. Publicado en 1789, este compendio de mapas y cartas náuticas ofreció por primera vez una representación precisa de las costas españolas y sus características geográficas. Este atlas no solo sirvió como una herramienta esencial para los navegantes, sino que también elevó el estatus de España en el ámbito de la cartografía mundial.

Además de su labor cartográfica, Tofiño fue un ferviente promotor de la educación científica entre los marinos españoles. Su plan de estudios para el Real Observatorio de la Marina en Cádiz es un testimonio de su compromiso con la formación integral de los oficiales de la Armada, combinando la práctica náutica con el rigor científico. Gracias a su visión, España contó con una generación de marinos astrónomos que continuaron su legado de innovación y precisión en la navegación y la cartografía.

El legado de Vicente Tofiño de San Miguel trasciende su contribución a la cartografía y la ciencia náutica. Su influencia se extendió más allá de las costas españolas, llegando incluso a la lejana Columbia Británica, donde la ciudad de Tofino lleva su nombre en honor a sus aportaciones geodésicas. Su trabajo no solo revolucionó la manera en que se concebía la cartografía marítima, sino que también estableció un precedente para la integración del conocimiento científico en la práctica naval.

Vicente Tofiño de San Miguel fue, en muchos sentidos, un hombre del Renacimiento atrapado en el siglo XVIII. Su curiosidad insaciable, su dedicación al avance del conocimiento y su compromiso con la educación de una nueva generación de líderes navales lo convierten en una figura emblemática de la ciencia y la navegación. A través de su trabajo, España no solo se posicionó a la vanguardia de la cartografía náutica sino que también sentó las bases para el futuro desarrollo científico y tecnológico de su Armada.